El ojo de un observador poco experimentado, y según la OMM, “sin formación en el uso del instrumento de medición”, pudo haber leído erróneamente la temperatura que marcaba el mercurio, un fallo que se habría agravado al situar la estación sobre una base de asfalto, un material que tiende a incrementar la temperatura.
Después de analizar estos y otros factores, la OMM rechazó la validez de la medida tomada en 1922 en El Aziza (a unos 40 kilómetros al suroeste de Trípoli) y estableció que la temperatura más alta alcanzada sobre la Tierra es la registrada el 10 de julio de 1913 en el Valle de la Muerte de California (Estados Unidos), de 56.7 grados centígrados.
El miembro del comité de expertos de la OMM Christopher Burt fue el primero en cuestionar la validez de la temperatura récord alcanzada en Libia tras escribir una entrada en su “blog”, y a partir de entonces trató de probar la fiabilidad del dato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario